1. La ergonomía: la silla debe adaptarse al cuerpo y a la postura del lector, ofreciendo un buen soporte lumbar, cervical y dorsal.
2. El material: la silla debe ser de un material resistente, duradero y fácil de limpiar. El tejido debe ser transpirable y agradable al tacto.
3. Las opciones: es importante que la silla disponga de regulación de aspectos como la altura del asiento, la altura del respaldo, la inclinación del respaldo, el giro de 360º y la altura y profundidad de los reposabrazos.
4. El estilo: la silla debe combinar con el resto del mobiliario y la decoración de su oficina o despacho. Puede elegir entre diferentes modelos, diseños y colores.
5. El espacio: la silla debe caber con holgura en su área de trabajo y permitirle moverse con facilidad. Debe tener en cuenta la altura y el grosor de la mesa de trabajo y el espacio de circulación.
6. La comodidad: la silla debe hacerle sentir cómodo y relajado, sin provocarle dolores ni molestias. Es importante probar las sillas antes de comprarlas para asegurarse de que se ajustan a las medidas de sus empleados.
7. La salud: la silla debe favorecer una postura saludable, evitando el sedentarismo y la rigidez. Debe levantarse y estirarse cada dos horas, cambiar de postura con frecuencia y realizar ejercicios de flexibilidad.

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