Según avanzamos en las fases de desescalada, muchas empresas han organizado la vuelta a la oficina de sus empleados, una vez establecidas las normas de seguridad para prevenir contagios. Y con esta nueva normalidad llegan sentimientos enfrentados a los sufridos nada más comenzar el confinamiento. Si al comienzo del mismo no soportábamos la idea de estar encerrados en casa las 24 horas del día, creándonos unos niveles de ansiedad por el momento nunca vistos, ahora, con la nueva normalidad, se forma en nosotros los mismos sentimientos pero justo por lo contrario, por tener que salir.

Y es que no todos los trabajadores quieren volver físicamente a la oficina y, mientras unos lo ven de forma positiva, a otros les crea una ansiedad difícil de gestionar. Los primeros echan de menos esa rutina diaria que diferencia su vida profesional de la personal, estar con los compañeros y compartir un café, o su mesa de escritorio con la que ya están familiarizados y hacen su trabajo mas ágil y fácil. Sin embargo, los segundos, ven en la recuperación de esta nueva normalidad una cantidad de cambios a los que obligatoriamente hay que adaptarse, creándoles como mínimo irritabilidad, incertidumbre y ansiedad.

La elaboración de una encuesta con una muestra de más de 25.000 personas en más de 50 países, ha dejado como resultado que, en nuestro país, el 70% de los españoles no se sentirá seguro de volver a la oficina hasta que no exista una vacuna contra la enfermedad, siendo solo un 26% las personas que querrían volver a su puesto laboral habitual. Para aquellas personas a las que entrar en confinamiento les supuso un estrés emocional, ahora, salir al mundo exterior, coger el metro, juntarse con otras personas, etc., les crea una nueva realidad difícil de afrontar. Controlar todo ese estrés que llega de golpe no es fácil, y los expertos hablan de aplanar la curva del estrés, superando con confianza los nuevos retos con las herramientas que tenemos. Para ello, dan una serie de recomendaciones ante la inevitable, más tarde o más temprano, vuelta a la oficina.

* En primer lugar hay que intentar pensar en positivo. No debemos imaginar que todo va a ser complicado, anticipando situaciones que una vez vividas, vemos en realidad que no ha sido tan grave.

* A veces una planificación previa nos ayuda a controlar la situación. En este sentido es bueno hacerlo, pero siendo lo suficientemente flexible para afrontar esos cambios inesperados. Con ello podemos ir adquiriendo nuevas habilidades que acrecentará nuestra confianza.

* En estos últimos meses hemos asistido a una gran cantidad de información que, en muchos casos era desinformación por la cantidad de mensajes contradictorios o porque era excesiva. En este sentido conocer con antelación qué medidas debemos atender nos dará tiempo a concienciarnos de lo que tenemos que hacer, para afrontar la situación de una forma real, sin pensamientos negativos imaginados.

* En la oficina, pasamos la mayor parte de las horas del día, de forma que, es imposible no establecer lazos emocionales con los compañeros. No todo es trabajo, las relaciones importan. En este sentido pensar en ese reencuentro es una gran motivación y nos puede ayudar a afrontar la vuelta a la oficina.

* La pandemia, ha puesto de manifiesto que es posible trabajar desde casa, pero también, ha dejado ver unos inconvenientes que son necesarios solventar. La conciliación laboral ha sido complicada, y la situación de trabajar con los hijos en casa ha sido muy complicado. A esto hay que sumar la difícil desconexión y las incomodidades de realizar tu jornada laboral sin el equipamiento o mobiliarios adecuado. Todo eso cambiará al volver a la oficina.

* Por último, y ante un momento difícil, habla con tus compañeros, eso ayudará a relajarte y empatizar con los demás.

Estamos en un proceso de adaptación, en el que lo que ayer valía, puede que hoy no, por lo que se precisa de la flexibilidad y compresión de todos para hacer frente a esos cambios y volver a la oficina, por qué no, con ilusión?

Te dejamos aquí el enlace a la noticia:

https://www.lavanguardia.com/vivo/psicologia/20200611/481704438052/oficina-covid.html